Ollanta Humala ha cumplido la promesa electoral que realizó al asumir el cargo de presidente del Perú en 2011, y el país se ha hecho con un satélite que les ayudará en tareas de defensa y vigilancia del país.
Lo cierto es que en estos años Perú ya ha puesto en varios órbita minisatélites fabricados por universidades del país, que tenían el objetivo de realizar tareas de investigación científica, pero este es el primero de gran tamaño.
En virtud del acuerdo suscrito con Francia, Perú ha adquirido el satélite submétrico de observación terrestre “Asrosat-300”, que tendrá un coste de S/. 597 millones de soles (alrededor de US$ 213 millones), incluyendo junto al sistema satelital la estación terrena de control, así como la transferencia tecnológica y los seguros.
El nuevo satélite será empleado para tareas de seguridad nacional, la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo, así como el estudio de fenómenos climáticos y naturales.
Por último se ha desvelado que a pesar de que el lanzamiento no se llevará a cabo hasta mayo de 2016, Perú podrá contar desde hoy con imágenes satelitales proporcionadas por Francia, exponen en Gestión.
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Si pero como es usual, los cuestionamientos vienen del lado de políticos opositores, donde estos últimos tambien vienen siendo investigados por casos de corrupción e incluso algunos ya judicializados.
Si bien es cierto es una buena noticia por lo que puede significar para el Perú, existen cuestionamientos por la forma que se hizo el contrato. El Presidente Humala realizó escalas de vuelo no programadas en Francia, sin conocimiento del Congreso de la República y la adquisición de este satélite se hizo sin un concurso público. Habrá que esperar el cambio del Gobierno para hacer las investigaciones pertinentes y determinar si hubo actos de corrupción.