Apple ha comenzado a trabajar en la construcción de su súper centro de datos de Prineville (estado de Oregón).
En concreto, ya está acondicionando el terreno para uno de los dos edificios de 31.400 metros cuadrados que la compañía con sede en Cupertino tiene previsto levantar en la zona.
Dentro de dicho edificio habrá dos “salas de datos”, a las que se sumarán las segundas instalaciones y catorce nuevas sub-estancias a lo largo de los próximos meses. Todas ellas tendrán un objetivo común: alimentar el servicio iCloud de Apple con potentes servidores.
Fiel a su política de privacidad, la firma que dirige Tim Cook no ha dicho nada acerca de cuándo estarán terminados estros trabajos iniciales y se podrá poner en marcha el centro, como tampoco ha anunciado una hoja de ruta para el resto de naves. Pero, según informa el periódico local The Oregonian, “cientos” de personas se encargarán de dejar listas las instalaciones de Prineville, que empleará a “docenas” de trabajadores cuando las obras estén finalizadas.
También se sabe que el datacenter de Prineville estará propulsado enteramente con energías renovables, en una combinación perfecta de fuerza eólica, hidroeléctrica y geotérmica.
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